Datos útiles

 

El soporte

Accesorio para el violín que se ajusta a su parte inferior y se coloca sobre el hombro. Pueden ser de diversos materiales y tipos, autoajustables, de diferente rigidez, etc. 

El soporte es imprescindible  para una buena postura,  para cuidar tus cervicales y tu espalda. La postura y la relajación son muy importantes para todos los violinistas, por ello, es fundamental un buen soporte. 

 

Diferentes tipos de soporte

El soporte a elegir depende de la anatomía de cada uno. Espalda ancha o estrecha, cuello largo o corto, etc. . Es importante que el profesor asesore al alumno/a sobre que soporte adquirir. Existe mucha variedad y cada uno de ellos tiene su particularidad. Se busca en todos los casos que el soporte sea lo más ergonómico posible de acuerdo a las características físicas del alumno/a. 

 

Modelo kun

Aunque kun es una marca y posee varios modelos diferentes, el modelo que más se utiliza y el más conocido es el siguiente:

La imagen superior muestra el modelo kun de la marca original y la inferior un modelo kun de una marca alternativa. En cualquier caso lo importante no es la marca sino el modelo.

Por lo general este soporte es el que mejor se adapta al cuerpo en la mayoria de los casos aunque como ya dijimos depende de cada alumno y además de cuan cómodo se sienta al mantener la postura correcta.

 

 Soportes Wolf

Otros de los soportes más usados son los Wolf en sus diferentes modelos. El más común es el siguiente:

Son más planos y permiten mayor separación entre el violín y el hombro. Poseen mucha estabilidad y se sujetan firmemente.

 

 Otros modelos de la marca Wolf

En caso de pensar en adquirir estos modelos wolf hay que tener en cuenta algunas cosas. A la hora de elegir este tipo de soporte para buscar el que mejor se adapte al cuerpo es una buena elección, pero surgen ciertos problemas a la hora de regularlos como ser: para alargar o acortar la longitud del soporte, cosa que es posible en estos soportes, los mismos poseen una varilla de metal con un tornillo; el caso es que cuando regulamos el soporte y quedamos satisfechos con el ajuste al violín, el tornillo se afloja frecuentemente y resulta ser muy molesto. Por otro lado las varillas antes mencionadas, en el caso de los modelos en que las mismas se encuentran dobladas impiden el giro del soporte, lo que dificulta que este se amolde al cuerpo; incluso el ángulo no se puede regular con el tornillo de ajuste.

Otros modelos